UAM-X

Durante los décadas comprendidas entre los años cuarenta y sesenta del siglo XX, se vivió en México un periodo de bienestar y desarrollo económico que benefició a una parte importante de la población, principalmente a los sectores medios y altos, y posibilitó una producción urbana y arquitectónica abundante y de calidad. La obra realizada en este periodo, que hemos identificado como Segunda Modernidad, guarda diferencias importantes con el funcionalismo de los años previos.

Asociada al Estilo Internacional, esta arquitectura posibilitó levantar obras públicas en beneficio colectivo, como escuelas, clínicas, hospitales y vivienda social. Se crearon nuevas colonias, centros urbanos y ciudades, que sirvieron para enfrentar el crecimiento demográfico y dieron soporte a la producción industrial, la cual permitió la sustitución de importaciones.

La obra privada fue igualmente significativa y se materializó en oficinas, centros comerciales, edificios de departamentos y casas unifamiliares, entre varias otras edificaciones innovadoras, donde se logró una alta calidad arquitectónica. No obstante, tampoco faltaron problemas –algunos inéditos– como los asentamientos humanos ilegales o en zonas peligrosas, así como una producción arquitectónica comercial y de baja calidad, que igualmente marcó a la época.

Las páginas de este libro nos introducen a la caracterización de este importante periodo de nuestra historia, a sus textos, programas y políticas, y así también nos acercan a algunas de las obras más significativas levantadas en la Ciudad de México, el interior del país y algunos lugares de América Latina.

El presente volumen es el primero de tres libros que conforman la colección que resultó del proyecto de Conacyt “Arquitectura y urbanismo a mediados del siglo XX: una Segunda Modernidad en México”. Los volúmenes restantes se titulan Segunda Modernidad urbano arquitectónica. Los proyectos y las obras y Segunda Modernidad urbano arquitectónica. Lecciones significativas.